El laurel es una planta aromática y medicinal, que se presenta en forma de árbol o arbusto de hoja perenne, y a la que siempre se le han atribuido importantes propiedades beneficiosas. Para aquellos que piensan en sus estudios clásicos, cuidado: la sabiduría no es el regalo que esta planta ofrece a quienes la usan. De hecho, si los antiguos griegos y romanos lo consideraban sagrado, era por sus beneficios para la salud más que por una cuestión de sabiduría.
En particular, al quemar una hoja de laurel en casa, puedes disfrutar de estos 7 beneficios.
1. Refuerza el sistema inmunológico: El laurel también contiene eugenol, que tiene propiedades antioxidantes y que, junto con otros nutrientes, apoya el sistema inmunológico.
2. Previene la diabetes: El consumo diario de la hoja de laurel ayuda a regular el azúcar en sangre y previene la diabetes tipo 2, gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
3. Alivia la ansiedad: El humo que produce la quema de la hoja de laurel libera compuestos químicos como el linalool, que si se inhala reduce la ansiedad y el estrés en 10 minutos, calmando el cuerpo y la mente.
4. Abre las vías respiratorias: Sumergir hojas de laurel en agua caliente libera un aroma que reduce la mucosidad y los catarros.
5. Alivia la inflamación: Laurel tiene una gran capacidad para desinflamar, gracias al eugenol.
6. Más preparación mental: Si el humo del laurel tiene un efecto calmante, también ayuda a despertar el cerebro gracias a sus compuestos químicos como el cineol y la elemicina; por lo tanto, es útil en caso de fatiga crónica.
7. Favorece la autoconciencia: Útil durante la meditación y el yoga, gracias a sus propiedades calmantes y de despertar mental, el laurel ayuda a preparar la consecución de un estado de autoconciencia.
Probablemente hasta ahora hayas utilizado el laurel principalmente en la cocina, para preparar deliciosos platos, pero es hora de llevar algunas hojas al salón y al dormitorio, para explotar al máximo todas sus virtudes 😉