Te encanta el pan recién hecho, recién salido de la panadería. Por desgracia, su frescura es de muy corta duración una vez en casa. Incluso te arrepientes de haber comprado varios palillos, porque nunca logras consumirlos a tiempo. Una cosa es cierta, el pan debe almacenarse correctamente para que no se endurezca ni pierda su textura blanda. Afortunadamente, existen formas sencillas de almacenarlo en óptimas condiciones y conservar su frescura. Sigue los consejos de Arnaud Lorgne, panadero de Saint-Gaudens para disfrutarlo más tiempo.
¿Cómo conservar el pan fresco durante varios días?
El pan sigue siendo un alimento básico en muchos hogares. Ya sea para hacer tostadas para el desayuno, bocadillos para el almuerzo o para acompañar un buen plato con salsa, el pan es parte integral de nuestra dieta. Pero, hoy en día, a menudo se pone a prueba. Los nuevos tipos de harina, la fermentación acelerada, los hornos eléctricos o los ingredientes de mala calidad son razones que acaban rancia, secando o endureciendo más rápido. Pero tranquilo, ya sea comprado o hecho en casa, existen varios trucos para mantenerlo fresco y esponjoso día tras día.
- En primer lugar, el pan debe almacenarse a temperatura ambiente, en un lugar seco y alejado de la luz solar directa.
Pan para respirar para mantenerlo mejor
- Lo mejor es guardarlo en una caja de madera, bolsa de tela o papel, ya que estos materiales le permiten respirar correctamente y retener la humedad. Evita guardarlo en una bolsa de plástico, sobre todo cuando esté caliente, ya que esto favorece la aparición de vapor. La humedad eventualmente se acumula y por lo tanto crea un ambiente propicio para el crecimiento de moho.
Conservar el pan con una patata
- ¿Un pequeño truco efectivo para conservar su frescura? El pan se mantendrá fresco por más tiempo si colocas un trozo de manzana (o incluso media patata) al lado. A medida que se seca, el pan conservará su humedad y sabor.
- Otro método conveniente es usar sal, ya que es un fuerte absorbente. Si se coloca junto al pan en la alacena , por ejemplo, extraerá el exceso de humedad y matará los gérmenes.
¿Cómo mantener fresco el pan casero?
¡Cuidado con los conceptos erróneos! Para mantenerlo fresco el mayor tiempo posible, algunas personas han optado por almacenar su pan casero en el refrigerador , pero esta no es una buena solución. Aunque el frío es capaz de prolongar su vida útil, corre el riesgo de modificar su textura, secarlo antes de tiempo y, por lo tanto, terminar enmohecido demasiado rápido.
Para conservarlo durante varios días, el congelador es la mejor opción. Para ello, es recomendable cortarlo en rodajas y ponerlas en un recipiente hermético. Luego, para descongelar correctamente tu pan, es recomendable dejarlo en el refrigerador durante tres horas, luego a temperatura ambiente.
Es bueno saberlo : una vez descongelado, el pan no se mantiene fresco tanto como el pan descongelado. Una baguette previamente congelada suele durar entre dos y cuatro días antes de secarse.
Otros métodos de almacenamiento de pan
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la caja de pan
Como seguro sabrás, unas cajas de madera están especialmente dedicadas a la conservación del pan. Además de aportar un toque elegante a la cocina, son conocidas por mantener frescas las rebanadas de pan. Y esto, en particular, gracias a los pequeños orificios que favorecen una buena circulación del aire, evitando así el desarrollo de moho. Sepa que puede almacenar pan (comprado o hecho en casa) durante unos tres días a temperatura ambiente en esta caja.
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Bolsa de papel
Si planea comerlo lo antes posible, envuelva su pan en una bolsa de papel en el mostrador. Si prefieres que dure un poco más, envuélvelo en film transparente o en una bolsa de plástico. Pero cuidado, este material no es recomendable en pleno verano y además aprende que puede quedar menos crujiente. Para restaurar su corteza, pon tus rebanadas en la tostadora o en el horno por unos minutos.
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bolsa de lino
Por último, la opción ideal para guardar el pan es la famosa bolsa de lino transpirable con cierre. No solo decora muy bien la encimera de tu cocina, sino que sobre todo te permite ahorrar en la compra de la bolsa de papel o plástico. El lino es un tejido ligero, resistente, duradero y lavable. Como beneficio adicional, sus propiedades evitan el exceso de humedad. A diferencia del plástico, que endurece el pan, el lino lo dejará respirar adecuadamente y conservará su frescura. Resultado: quedará más crujiente por fuera y muy suave por dentro.
Consejo: si no tiene una bolsa de pan de lino a mano, una toalla de lino limpia y seca o un paño de cocina de algodón también servirá. Solo asegúrese de envolver bien el pan para que ninguna parte quede expuesta al aire.