Trucos de bicarbonato de sodio. 7 usos domésticos del bicarbonato de sodio

Los fanáticos del sistema D te lo dirán. Para cada tarea doméstica, existe una opción alternativa a los productos químicos, a menudo nocivos para el medio ambiente. Descubra cómo el bicarbonato de sodio puede ayudarlo a hacer estas 7 cosas.

Producto reconocido como el ingrediente del hogar por excelencia, el bicarbonato de sodio es formidable para muchas tareas del hogar. Además, te simplificará el día a día con la ventaja de ser muy económico. Repasemos sus diferentes usos: 

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Bicarbonato de sodio – Fuente: Express

1. Para limpiar alfombras y colchones

Ya sean manchas o malos olores, el bicarbonato de sodio es ideal para limpiarlos en tu colchón o alfombra. Reconocida por sus propiedades antibacterianas y sanitizantes, su técnica de preparación es sencilla. Tienes que mezclar dos tazas de este polvo blanco con una taza de agua y cubrir el colchón o la alfombra con esta pasta. Luego déjalo toda la noche y limpia los residuos con un paño de microfibra. Un poco más: incluso puedes usar esta técnica para eliminar los olores de los zapatos. Sorprendente, ¿verdad?

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Bicarbonato de sodio para alfombras – Fuente: Express

2. Para destapar desagües

Si tus tuberías están obstruidas o desprenden malos olores, el bicarbonato de sodio es ideal. Y por una buena razón, este ingrediente es astringente y ayuda a disolver los tapones y residuos que obstruyen los desagües. Para este truco de fontanería necesitarás verter media taza de este producto en la tubería a la que le añadirás media taza de vinagre blanco. Luego cubre el agujero con un paño húmedo. Notarás que se está produciendo una reacción química. Déjalo actuar unos minutos y enjuaga el desagüe con agua caliente. ¡Esto es lo que llamamos Sistema D! Existen otros trucos para desatascar desagües en menos de 5 minutos.

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El bicarbonato de sodio es el ingrediente doméstico por excelencia – Fuente: Getty Images

3. Limpia las paredes

Las paredes son muy vulnerables a las manchas. Salpicaduras, huellas de manos, amarillamiento son cosas que pueden alterar el blanco o cualquier otro color. Afortunadamente, el bicarbonato de sodio puede solucionar este desafortunado problema. Simplemente sumerja una esponja húmeda en este producto . Para obtener los mejores resultados, utilice el lado áspero de una esponja para eliminar los residuos persistentes. Un truco eficaz que te salvará de utilizar un producto de limpieza agresivo. 

4. Limpia hornos y microondas

Estos equipos pueden ser difíciles de limpiar debido a las impurezas persistentes que contienen. Primero retire las rejillas del horno y el plato giratorio del microondas. Luego, mezcle un tazón de bicarbonato de sodio con agua o vinagre blanco hasta que se forme una pasta. Este último debe extenderse en las paredes de los aparatos desconectados. Déjalo reposar toda la noche, limpia con un paño húmedo y ¡listo! Para un toque extra de limpieza, rocía unos chorros de vinagre blanco, es un limpiador natural. También puedes usarlo para toda tu casa.

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Combinado con vinagre blanco, el bicarbonato de sodio es muy útil para limpiar tanto hornos como microondas – Fuente: Getty Images

5. Limpie los refrigeradores

Debido a que estos electrodomésticos contienen alimentos, son más propensos a emitir malos olores y acumular bacterias. Es por ello que es muy importante mantenerlos bien. Y para eso, el bicarbonato de sodio es ideal. Esta es una técnica muy simple ya que solo tienes que colocar una caja abierta de bicarbonato de sodio durante la noche o más en tu refrigerador. Este polvo blanco absorberá los malos olores. 

6. Lava platos y ollas

¡Hay manchas difíciles y grasientas contra las que ningún lavavajillas es eficaz! Afortunadamente, el bicarbonato de sodio está aquí para ayudar y puede ayudar a aflojar los residuos más pegajosos y hacer que sus sartenes brillen. Para ello, simplemente añade unas cucharadas de esta fórmula a la que añadirás líquido lavavajillas y agua tibia. Deje esta mezcla en remojo por unos momentos y frote la sartén con una esponja húmeda ya cubierta con bicarbonato de sodio. Un método formidable cuando el líquido lavavajillas ya no es suficiente. 

7. Limpia tus esponjas

Si tus esponjas son los objetos imprescindibles del aseo de tu hogar, también merecen ser limpiadas. A fuerza de usarse, pueden oler mal incluso si todavía son funcionales. Puedes reutilizarlos dándoles una limpieza express. Y nada mejor que el bicarbonato de sodio para salvarlos. Para ello, remoja la esponja en un fregadero lleno con un litro de agua y cuatro cucharadas de este polvo multiusos. Dejar toda la noche y dejar secar al aire. Di adiós a los malos olores y residuos. 

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